La reconstrucción de los hospitales, los centros de atención y los programas y equipos de trabajo comunitario en prevención y promoción de la salud en la provincia de Buenos Aires son prioridades, a fin de superar la grave emergencia sanitaria heredada.
El Gobierno del Frente de Todos ya anticipó que se modernizarán hospitales cuyas obras se iniciaron antes de 2015 y que no se continuaron en los distritos de Cañuelas, La Matanza, Escobar, Ituzaingó y Esteban Echeverría. Se pondrán en marcha, además, las obras que permanecen paradas en el hospital Oñativia de Almirante Brown, desactivado luego de un incendio a fines de 2018.
La reciente aprobación de la ley impositiva y el próximo reperfilamiento de parte de la deuda pública bonaerense muestran el giro de políticas que, en el caso sanitario, se orienta especialmente a atender el rebrote de sarampión, con 85 casos confirmados en 15 municipios del Conurbano (especialmente en Merlo, La Matanza y Moreno).
La campaña inmediata busca superar la desidia evidenciada al encontrarse más de 144 mil dosis de vacunas vencidas. Se descubrieron además otras 16.700 dosis de vacunas antigripales, antipoliomielíticas y contra el sarampión ya vencidas o sin la correcta cadena de frío, a punto de ser descartadas.
Otras urgencias provinciales obedecen a la desatención de discapacitados y de servicios críticos como diálisis y rehabilitación, y la suspensión de programas de medicamentos. En materia de Salud Sexual y Reproductiva, en tanto, en estos últimos cuatro años aumentaron en un 400% los casos de sífilis y en un 500% los de sífilis congénita, por falta de controles en el embarazo.
Corregir el rumbo es prioridad, a fin de recuperar la salud pública para los y las bonaerenses.